La adularia pertenece al grupo de los feldespatos y se considera una variedad superior de ortoclasa. Su nombre hace referencia a las montañas Adular, en Suiza, lugar donde se encuentran yacimientos de este mineral.
La adularia puede ser de tonos rosados, gris, blanco, crema y amarillos. Se encuentra en filones hidrotermales y suele formar maclas y también puede aparecer en forma masiva, granular o criptocristalina. La adularia suele presentar una irisación en su superficie llamada adularescencia.
La adularia es una piedra de cierto interés en el campo del coleccionismo y en el de la gemología. Los ejemplares más hermosos son muy codiciados por los amantes de los minerales, mientras que los de la piedra de la luna son tallados y trabajados para la producción de joyas.
Historia
En época de los antiguos griegos se sostenía que la piedra de la luna permitía adivinar el futuro, agudizar la capacidad de intuición y de memoria e influir positivamente en algunas actividades de la agricultura que estaba ligada a los ciclos lunares. Es también conocida que todo aquel que posea una piedra luna tendrá una relación amorosa duradera.
Dónde se encuentra la adularia
La adularia es un mineral bastante valorado porque no puede encontrarse en demasiados lugares de la tierra. Sin duda alguna, los mejores minerales o ejemplares de adularia, también conocida como piedra de la luna, pueden encontrarse en la India, así como también en Sri Lanka. Otros ejemplares muy valorados por los coleccionistas son los que se encuentran en Suiza y en Austria.
Propiedades
Posee la propiedad de cambiar su apariencia reflejando el estado anímico de la persona que la lleva o del ambiente en el que se encuentra. En estados positivos brilla y refleja colores azulados; en estados desarmónicos se vuelve opaca y sin brillo. Equilibra las energías masculinas y femeninas. Ejerce de antídoto perfecto para la mujer con una dosis excesiva de energía masculina o para el hombre exageradamente macho.
La Adularia puede trabajar como una piedra de crecimiento para los adolescentes y los niños, y se ha demostrado que en algunas ocasiones retrasa la degeneración de las personas de la tercera edad.
Puede mejorar la presencia de patologías degenerativas en los ojos, el cabello y hasta en la piel, así como en algunos órganos carnosos que se consiguen en el cuerpo. Es muy útil para traer sueños positivos. Se puede utilizar para mejorar el aprovechamiento de los nutrientes, eliminar las toxinas y tratar alguno de los problemas en el sistema digestivo.
Es muy poderosa tanto a nivel físico como a nivel mental. A nivel físico esta piedra está muy vinculada con todo el aparato reproductor femenino. También es muy beneficiosa para el sistema circulatorio y digestivo. A nivel emocional la piedra lunar tiene la capacidad de equilibrar y estabilizar las emociones. Si te resulta difícil encontrar la calma, la piedra lunar es perfecta para ayudar a serenar los malos momentos.
Representa la naturaleza cíclica del ser humano y favorece el equilibrio emocional, mental y físico en los procesos de crecimiento interior. Se considera una piedra espiritual y potencia la parte Ying de las personas, que el taoísmo define como el principio femenino, el de la intuición, la receptividad y la creatividad desde la no acción. Fomenta el equilibrio entre las energías masculina y femenina.
También es conocida por ser beneficiosa para el ciclo reproductivo femenino, para las dolencias relacionadas con la menstruación y para equilibrar el sistema hormonal.
En aquellas mujeres que no son capaces de expresar lo que sienten, esta gema les ayuda a encontrar un canal de comunicación a través del cual pueden transmitir aquello que se encontraba reprimido en su interior. Elimina el exceso de sensibilidad en aquellas mujeres que, constantemente, son sentimiento en estado puro, Contribuye a fomentar la sensualidad.
Está considera como el mineral de los nuevos comienzos así como del crecimiento interior. Ayuda a aceptar mejor el cambio, reduciendo cualquier miedo que pueda surgir asociado a los nuevos escenarios. Ha sido utilizada por muchas culturas y sigue utilizándose como amuleto protector para los viajes. Llévala cuando estés lejos de casa, especialmente en travesías marítimas o aéreas.
Adularia y Feng Shui
Utiliza la energía del metal, la energía de la inteligencia, la contracción, la curación y la creatividad. Es la energía de unión y cristalización, de ideas, conceptos y grupos.
Utilice la energía de este cristal blanco para mejorar cualquier espacio que utilice para concentrarse, reunir fuerzas o trabajar con un grupo.
Limpieza
Uno de los métodos de limpieza que puedes aplicar es lavarla con agua salada, esta piedra es resistente a los químicos, pero debes tener en cuenta que no es bueno abusar de eso y con tan solo limpiarla una vez por mes es suficiente.
Los momentos ideales para realizar la limpieza de la piedra es en:
En cuarto menguante y luna nueva: es propicio limpiarlo durante la luna llena o menguante ya que en estos ciclos la energía se dirija al interior de la tierra absorbiendo así toda la negatividad. Sobre todo si la entierras.
El humo del incienso: pasar el humo permitirá eliminar las energías negativas que se encuentren impregnadas en la piedra.
Bajo un chorro de agua: colocar la piedra bajo una corriente de agua, tal como una cascada o un rio ayudará a arrastrar la negatividad logrando una limpieza segura.
Enterrada bajo tierra: enterrar la piedra bajo tierra durante varios días, logrará que tenga una limpieza profunda, eliminando toda negatividad que haya atraído la piedra. Recuerda siempre donde colocas la piedra para que no la extravíes.
En agua con sal: en un recipiente con agua agrega una cucharada de sal y solo coloca la piedra durante 24 horas, sécala y estará lista para ser recargada.
Con la visualización: Si eres de las personas que tienen desarrollado su sensibilidad energética, te será fácil percibir cuando es momento de realizar una limpieza o recarga a tu piedra. Al momento de la meditación puedes utilizar alguna luz, líquido u otro elemento que inunde la piedra hasta que quede totalmente limpia.
