La sinusitis

La sinusitis es la afección que consiste en la inflamación o hinchazón del tejido mucoso que recubre los senos paranasales. Ocurre como resultado de una infección por virus, hongos o bacterias o bien debido a diversos alérgenos. Según su duración, puede clasificarse en Sinusitis Aguda, Sinusitis Subaguda y Sinusitis Crónica. Según la zona afectada, se clasifica como sinusitis etmoidal, sinusitis esfenoidal, sinusitis frontal o sinusitis maxilar.

Síntomas

Los signos y síntomas frecuentes de la sinusitis crónica comprenden los siguientes:

  • Inflamación nasal
  • Secreción espesa y descolorida de la nariz
  • Secreción por la parte posterior de la garganta (secreción posnasal)
  • Obstrucción o congestión nasal, que dificultad para respirar por la nariz
  • Dolor, sensibilidad e inflamación alrededor de los ojos, las mejillas, la nariz o la frente
  • Reducción del sentido del olfato y del gusto

Otros signos y síntomas pueden comprender los siguientes:

  • Dolor de oído
  • Dolor en la mandíbula superior y en los dientes
  • Tos o carraspera
  • Dolor de garganta
  • Mal aliento
  • Fatiga

La sinusitis crónica y la sinusitis aguda tienen signos y síntomas similares, pero la sinusitis aguda es una infección temporal de los senos nasales a menudo asociada con un resfriado. Los signos y síntomas de la sinusitis crónica duran al menos 12 semanas, pero puedes tener varios episodios de sinusitis aguda antes de desarrollar sinusitis crónica. La fiebre no es un signo común de la sinusitis crónica, pero podrías tener fiebre con sinusitis aguda.

Causas

Las causas principales de esta patología son las infecciones, ya sean víricas (las más frecuentes), bacterianas y fúngicas. Existen otras causas relacionadas con los mecanismos inflamatorios y del sistema inmune del propio paciente, que pese a estar ampliamente demostradas sus implicaciones, todavía se desconoce del mecanismo exacto.

Algunas causas puede ser por :

La sinusitis
  • Pólipos nasales. Estos crecimientos de tejido pueden bloquear los conductos nasales o los senos paranasales.
  • Tabique nasal desviado. Un tabique (la pared entre las fosas nasales) torcido puede restringir u obstruir los conductos de los senos paranasales y empeorar los síntomas de la sinusitis.
  • Otras afecciones. Las complicaciones de afecciones como la fibrosis quística, el VIH y otras enfermedades relacionadas con el sistema inmunitario pueden provocar una obstrucción nasal.
  • Infecciones de las vías respiratorias. Las infecciones del aparato respiratorio, más comúnmente los resfriados, pueden inflamar y engrosar las membranas de los senos paranasales y bloquear el drenaje de la mucosidad. Estas infecciones pueden ser virales, bacterianas o fúngicas.
  • Alergias como la fiebre del heno. La inflamación que ocurre con las alergias puede bloquear los senos paranasales.
  • Tabaco: Tanto ser fumador activo como estar expuesto a su humo es un factor predisponente en esta patología.
     
  • Exposiciones ambientales o laborales: A la contaminación, a irritantes utilizados en la industria y a la exposición al humo
  • Hipertrofia de adenoides (tejido linfático que se encuentra en las vías respiratorias entre la nariz y la parte posterior de la garganta).
     
  • Sometimiento a fuerzas :Como la gravedad y la presión: volar, bucear, montañismo, etcétera.

Prevención

  • Aumentar la humedad del cuerpo y de las vías sinusales mediante la ingesta de líquidos, especialmente agua, y el uso de un humidificador.
     
  • Atajar rápidamente y de forma eficaz las alergias.
     
  • Evitar el humo y espacios contaminantes.
     
  • Administrar descongestionantes si se sufre una infección de las vías respiratorias.

Tipos

Existen dos tipos de sinusitis, que vienen determinados por la duración de la enfermedad y sus síntomas:

  • Sinusitis aguda: su duración es menor a 12 semanas. Es una patología muy frecuente y se le estima una prevalencia entre el 6 y el 15 por ciento. Causada principalmente por infecciones víricas y conocida en ocasiones como catarro común. Es más habitual en las épocas invernales.

    Se estima que el 0,5 y el 2 por ciento de estas rinosinusitis agudas víricas se convertirán en bacterianas, caracterizadas entonces por presencia de mucosidad purulenta, fiebre, dolor unilateral intenso, empeoramiento posterior al inicio de la recuperación. En estos casos está indicado el uso de antibióticos sistémicos.
     
  • Sinusitis crónica: su duración es igual o mayor a 12 semanas. Con una prevalencia estimada de entre el 2 y el 16 por ciento de la población. Existen dos tipos principales: con pólipos y sin ellos. Debido a su curso crónico y su molesta sintomatología los subtipos más graves de estas sinusitis pueden generar una gran alteración de la calidad de vida del paciente.

    Además de por las bacterias, también puede ser causada por hongos.

Diagnostico

Tu médico de cabecera te preguntará cuáles son tus síntomas y te examinará. También te hará preguntas sobre tus enfermedades y operaciones anteriores.

Por lo general, tu médico podrá diagnosticar la sinusitis aguda simplemente examinándote, sin necesidad de acudir a otros estudios médicos.

Si tienes sinusitis crónica, y tu tratamiento no ha dado resultado, tu médico de cabecera puede referirte a un médico que se especialice en oído, nariz y garganta. Puedes necesitar una radiografía para determinar la causa de tu sinusitis crónica. El especialista puede recomendar una nasoendoscopia (también conocida como endoscopia nasal), en la que se te inserta por la fosa nasal un pequeño tubo flexible con una luz y un lente de cámara en el extremo (endoscopio) para poder ver dentro de los senos nasales.

Tratamientos

Estos son algunos de los tratamientos contra la sinusitis crónica:

  • Corticoesteroides nasales. Estos aerosoles nasales ayudan a prevenir y tratar la inflamación. Algunos ejemplos son fluticasona, triamcinolona, budesonida, mometasona y beclometasona. Si los aerosoles no son lo suficientemente eficaces, el médico podría recomendarte un lavado con una solución de solución salina mezclada con gotas de budesonida o usar un vaporizador nasal para la solución.
  • La irrigación nasal salina, con aerosoles o soluciones nasales, reduce el drenaje y elimina los irritantes y las alergias.
  • Corticosteroides orales o inyectables. Estos medicamentos se usan para aliviar la inflamación de la sinusitis grave, especialmente si también tienes pólipos nasales. Los corticosteroides orales pueden causar efectos secundarios graves cuando se usan a largo plazo, por lo que solo se emplean para tratar síntomas graves.
  • Tratamiento de desensibilización con aspirina, si tienes reacciones a la aspirina que causan sinusitis. Bajo supervisión médica, recibes gradualmente dosis mayores de aspirina para aumentar la tolerancia.

Antibióticos

Si tienes una infección bacteriana, algunas veces es necesario usar antibióticos para tratar la sinusitis. Si el médico no puede descartar una infección oculta, te puede recomendar un antibiótico; algunas veces combinado con otros medicamentos.

La sinusitis

Inmunoterapia

Si las alergias empeoran la sinusitis, las vacunas antialérgicas inyectables (inmunoterapia) que ayudan a reducir la reacción del cuerpo a alérgenos específicos pueden mejorar la afección.

Cirugía

En los casos de resistencia al tratamiento o el medicamento, la cirugía endoscópica de los senos paranasales puede ser una opción. Para este procedimiento, el médico utiliza un tubo delgado y flexible con una luz conectada (endoscopio) para explorar las fosas de los senos paranasales.

Dependiendo de la fuente de obstrucción, el médico puede usar diversos instrumentos para retirar el tejido o quitar un pólipo que provoca la congestión nasal. Ampliar la apertura de unos senos paranasales estrechos puede ser una opción para fomentar el drenaje.