El desgaste diario puede hacer estragos en nuestro organismo. La sensación de que te faltan energías y que quisieras pasar todo el día durmiendo puede ser la primera señal de alerta.  Lo peor sucede cuando, a pesar de dormir muchas horas seguidas, continúas cansado o desganado. Por ello el día de hoy te traemos los mejores consejos para eliminar el cansancio. Síguenos leyendo.

El cansancio es la falta de fuerzas después de realizar un trabajo físico, intelectual o emocional, o por la falta de descanso. Pero puede ser síntoma de una enfermedad, si no hay una actividad previa que lo justifique.

¿Cuáles son las causas?

Las causas más habituales de cansancio físico y mental son:

Jornadas extensas de trabajo.

Práctica de ejercicios de manera intensa.

No dormir las horas adecuadas o trastornos del sueño.

Abusar de diuréticos, tranquilizantes y laxantes.

Déficit de vitaminas o proteínas.

Convalecencia por enfermedad o cirugía.

Mala alimentación, anemia o no cumplir con la cantidad de ingestas diarias.

Embarazo.

Fumar.

Obesidad.

Estrés o trastornos depresivos.

Enfermedades como diabetes, fibromialgia, cáncer, hepatitis o hipotiroidismo.

Consejos para eliminar el cansancio

No te saltes el desayuno

Si te saltas el desayuno no recibirás energía para la mañana. Recuerda que debe contener proteínas, carbohidratos, algo de grasa y algo de vitaminas como un jugo o una fruta.

Realiza alguna actividad física

El deporte nos hace generar endorfinas, aumenta la sensación de euforia y nos ayuda a mantener los huesos y músculos en buen estado. Alejarnos del sedentarismo puede ser una de las claves más importantes para alejar el cansancio de nuestras vidas.

Manténte hidratado

El agua es el más simple de los remedios y soluciones para el cansancio. Asegúrate de tomar 2 litros de agua al día para evitar el estreñimiento, evitar los dolores musculares y de cabeza, así como para ayudar a eliminar las toxinas de cuerpo.

Elimina toxinas

A veces la fatiga es consecuencia de que tu cuerpo acumula toxinas. Haz un día de dieta depurativa a base de frutas y verduras. Es decir, prueba con los jugos détox y te sentirás como nuevo.

Aparta tiempo para ti

Reserva algo de tiempo para darte un baño relajante, oír música tranquila o leer un libro que te apasione. Cambiar de actividad y parar unos minutos al día, evitará que acumules tanta fatiga.

Paradas durante la jornada

Cada 2 horas durante tu jornada laboral, debes pararte a estirar los músculos, tomar agua y sociabilizar por al menos 10 min.

Planifica tu jornada

El caos cansa el doble que la misma actividad ordenada. Además, si te organizas no irás corriendo por la vida y podrás relajarte. Lo más recomendable es que tengas una agenda con calendario para planificar mejor y evitar que no te saltes nada.

Un baño antes de dormir

El agua caliente nos ayuda a relajar los músculos después de un largo día de trabajo. Puedes darte un baño antes de irte a la cama para destensarte y relajarte, así conseguirás conciliar antes el sueño y descansar lo suficiente como para deshacerte del cansancio extremo al día siguiente.

Descansa también del deporte

Entrenar es imprescindible si quieres superar una marca o te estás preparando para una prueba, pero tus músculos necesitan también un descanso. Para al menos uno o dos días, tras cinco días de entrenamiento seguido. Si no lo haces acumularás más ácido láctico y te sentirás agotado.

Regula los horarios

Llevar una rutina de horarios de comidas, sueño y trabajo. Así tu reloj biológico no se verá afectado y respetarás sus tiempos.

Descansa cuando te sientas agotado

Tomate un tiempo libre para una completa ruptura física y mental con tu lugar de trabajo. Esto no significa necesariamente que tengas que pasar dos semanas en un spa o resort. Incluso unos pocos días de descanso en casa puede darte una sensación de estar en un ambiente completamente diferente y relajante.

Aprende a delegar

No pretendas hacerlo tú todo. Un poco de ayuda es necesario para no sobrecargar ni a tu cuerpo ni a tu mente.

Duerme lo suficiente

Procura dormir ocho horas. En silencio y a oscuras. En una habitación a unos 21 grados y en posición boca arriba o de costado.

No te levantes de sopetón de la cama

Respira profundo y consciente durante dos minutos al levantarte y dos antes de acostarte. Deja la mente en blanco y sé consiente de cómo el aire entra en tus pulmones, infla tu vientre y expande el diafragma. Espira echando el aire por la boca y vaciando completamente tus pulmones.

Descansa la vista

Procura apartar la vista de la pantalla cada cierto tiempo para fijarla en un punto lejano y parpadear, de esta manera evitaremos que nuestros ojos fuercen y se mantengan en tensión. Una vista cansada puede generar dolor de cabeza y cansancio, algo que, definitivamente no queremos.

Cena ligero

Cena ligero, para que la digestión no influya en tu descanso.

Relaja cuerpo y mente

Tan importante es practicar ejercicio como aprender a relajarnos. Existen diferentes actividades, como el yoga o la meditación, que pueden sernos especialmente útiles para combatir el estrés que genera a veces este tipo de cansancio.

Batidos contra la fatiga

Batido energético

Puedes comenzar la mañana con este batido que te aporta mucha energía, con grasas saludables y un buen contenido proteico y de fibra, para que no te preocupes por un posible aumento de peso.

Ingredientes

1 vaso de leche de almendras sin azúcar

½ plátano

 3 cucharadas de yogur griego natural al 2%

1 puñado de espinacas

 ½ cucharadita de mantequilla de cacahuete.

Coloca todos los ingredientes en la batidora y mezcla hasta que el batido tenga un color homogéneo.

Te de jengibre

Es uno de los mejores remedios y soluciones para el cansancio por sus propiedades desinflamatorias, por lo que ayuda con los dolores musculares causados por la fatiga. Además, es desintoxicante y estimula el sistema nervioso aportando más energía.

Solamente tienes que hacer infusiones con la raíz de jengibre para ir tomando durante el día. También puedes preparar un litro de agua de jengibre y tomarlo durante el día.

Consulta con tu medico

Conversa con tu médico acerca de hacerte análisis de sangre para descartar causas bioquímicas comunes. Si el estudio resulta ser normal, este te guiara acerca de causas menos comunes, como fatiga crónica, fibromialgia y otras enfermedades.