Para personas con empleados a su cargo, saber como ser un buen jefe puede marcar la diferencia. Por lo tanto, ser un buen líder contribuye de forma significativa al éxito de la empresa. Debido a que por encima de todo ayuda a generar un ambiente de trabajo positivo que se traducirá en mejores resultados y en equipos más eficientes y productivos. En consecuencia te citamos algunas recomendaciones a seguir para que te conviertas en un ¡buen jefe!.

Saber motivar

Un buen jefe debe tener la capacidad de conseguir compromisos de esfuerzo, de sacrificio, de creatividad, de respeto y de energía por parte de su equipo. Sin embargo, en caso de poseer un perfil muy técnico y esa ha sido tu forma de convertirte en jefe tienes que recordar que tu desarrollo profesional no acaba con la parte técnica.

Aprender a delegar

Un buen jefe, debe comprender la importancia de ir creando un sólido equipo, en el que podamos confiar para así delegar el trabajo y optimizar tiempos (y reducir estrés).

Reconocer los esfuerzos

El refuerzo positivo es una de las formas más efectivas para que los empleados se sientan valorados y sigan desarrollando una buena labor. Es importante mantener una comunicación constante y saber transmitir las cosas que se están haciendo bien, premiando y reconociendo los esfuerzos.

Acercarse sin ser un amigo

Como ser un buen jefe

Un buen jefe sabe acercarse a los demás, pero tampoco demasiado para que lo confundan con un amigo. Para aclarar: «No está mal acercarse a los trabajadores», conocer sobre sus vidas o inclusive comprender cuando tengan malos momentos o situaciones complicadas pero no se debe sobrepasar la delgada línea entre trabajo y amistad.

Agradecer

El hecho de premiar a tus trabajadores por algo que hacen bien, promueve que realicen aquellos actos por los que han sido reforzados.

Comunicación y transparencia con los empleados

El jefe transmite los objetivos y la estrategia de la empresa, por eso es importante que mantenga una comunicación fluida con los empleados. La falta de comunicación, la poca transparencia o un entorno de trabajo en el que los trabajadores tienen miedo a expresar sus opiniones es potencialmente muy negativo para la empresa.

Saber escuchar

Para ser un buen jefe, hay que aprender a escuchar para poder tomar las mejores decisiones.

Hacer reuniones para hacer balance de la situación

Las reuniones son una oportunidad para hacer balance de la situación y trabajar conjuntamente para resolver los problemas que hayan podido surgir. En consecuencia, hay que entender cada reunión como una oportunidad de mejora que puede fortalecer al equipo.

Transmitir confianza y dar ejemplo

Valores como la empatía, fomentar el trabajo en equipo, la honestidad, ser justo o comportarse de forma responsable mejorarán sin duda el compromiso de los empleados y su desempeño en el trabajo. Sin duda, todas estas actitudes ayudarán a construir un vínculo de confianza con los trabajadores.