La terapia ocupacional (OT, por su siglas en inglés) ayuda a las personas a las que se les dificultan las actividades diarias debido a que sus habilidades motoras son limitadas. Para los niños, eso incluye actividades que son parte del aprendizaje y del buen funcionamiento en la escuela. La OT trabaja con las destrezas que los niños necesitan para hacer las cosas que se les dificultan, desde subirse el cierre de su pantalón, hasta escribir y teclear

Esto es lo que usted necesita saber acerca de la terapia ocupacional.

La terapia ocupacional

¿Qué es la terapia ocupacional?

La terapia ocupacional es una profesión sanitaria, cuyo objetivo es conseguir que las personas con alguna restricción en la participación dentro de su entorno, puedan desarrollar sus actividades de la vida cotidiana de forma independiente y autónoma.

Es decir, todas las personas realizamos diariamente actividades para nuestro autocuidado (como alimentarnos, asearnos o desplazarnos), desempeñamos ocupaciones productivas (estudiar, trabajar, hacer voluntariado, etc.) y tenemos momentos de ocio. Los terapeutas ocupacionales tratamos de facilitar que cada persona haga y elija las actividades que le interesan, independientemente de sus condiciones físicas o psíquicas.

¿Con qué personas trabajan los terapeutas ocupacionales?

Con cualquier persona que tenga una restricción en la participación en su entorno o situación de dependencia, en cualquier momento del ciclo vital (desde la infancia a la tercera edad).

Por lo general, los terapeutas ocupacionales que trabajan con niños, lo hacen porque no han alcanzado el desarrollo que se espera para su edad. Quizá estos niños no son capaces de jugar con sus juguetes, de realizar las tareas que se le pide en el colegio o no se relacionan con otros niños. Los terapeutas tratan de estimular la adquisición de esas habilidades directamente con el niño, pero también ayudan a la familia a que se sienta segura aportando los mejores cuidados a su hijo.

Cuando se trabaja con personas adultas, suele ser debido a la presencia de alguna patología, que restringe su autonomía. Puede ser por distintos motivos:

  • Patologías neurodegenerativas: Parkinson, Alzheimer, esclerosis múltiple, ELA, etc.
  • Patologías neurológicas sobrevenidas: ictus, traumatismo craneoencefálico, lesión medular, etc.
  • Lesiones traumatológicas (amputaciones) o reumáticas (artritis, artrosis).
  • Patologías psiquiátricas.
  • Discapacidades congénitas, que permanecen en la edad adulta: Síndrome de Down, parálisis cerebral, afectación de la visión, audición, etc.

Pero, también están presentes en ámbitos menos comunes, en los que no tiene porqué existir patología como las cárceles o los centros para tratamiento de adicciones (alcohol, drogas). En el ámbito más comercial, podemos encontrarlos en ortopedias, con el fin de asesorar a las personas que necesitan productos de apoyo (sillas de ruedas, adaptaciones para el domicilio, ortesis, etc.).

Por último, la tercera edad, es un colectivo con el que el terapeuta ocupacional tiene un papel fundamental, ya que es un momento en el que van perdiendo ciertas facultades físicas, cognitivas y sensoriales. Con o sin patología, la persona mayor ve reducidas sus capacidades y debe adaptarse a ello.

¿Qué hace un terapeuta ocupacional?

Dependiendo de la edad y la patología que aborden, los terapeutas ocupacionales actúan como rehabilitadores integrales, es decir, ayudan a los pacientes a dominar las actividades básicas de su día a día tales como vestirse, comer o utilizar el baño solos.

Dentro de sus funciones destacan:

  • Valorar las capacidades y limitaciones de cada persona.
  • Elaborar y evaluar los programas de tratamiento de rehabilitación, marcando los distintos objetivos.
  • Entrenar con el paciente las actividades básicas de la vida diaria.
  • Prescribir y entrenar en el uso de órtesis, prótesis y otras ayudas técnicas.
  • Elaborar programas de adaptación del entorno y la eliminación de barreras arquitectónicas.
  • Capacitar al individuo para lograr el mayor grado de reinserción socio-laboral posible como miembro activo dentro de su comunidad.

¿En qué consiste el tratamiento de la terapia ocupacional?

Al inicio se realiza una valoración médica y psicológica del paciente, luego se identifican las áreas dentro de las cuales está presentando las deficiencias. También se evalúan las habilidades que tiene y que se pueden desarrollar para encontrar un equilibrio entre ambas.

Por último se le da tratamiento al paciente y se le capacita para que logre realizar actividades sencillas, como por ejemplo su cuidado personal. Hasta que logre desarrollar nuevamente todo su potencial y controle sus habilidades para llegar a vivir una experiencia positiva cada día de su vida.

Cómo puede ayudar la OT con desafíos específicos

Los niños que enfrentan ciertos desafíos a menudo necesitan OT. Una condición que afecta las habilidades motoras es el trastorno del desarrollo de la coordinación (a veces llamado dispraxia). Hay una serie de actividades que los terapeutas podrían usar para ayudar a mejorar diversas habilidades.

Un ejercicio para las habilidades motoras finas podría ser que los niños agarren objetos con pinzas. Para ayudar con la dominancia de la mano (derecha o izquierda), los niños pueden practicar cortar con las tijeras. Para desarrollar las habilidades motoras gruesas, los niños podrían hacer saltos de tijeras, atrapar pelotas de diferentes tamaños o correr carreras de obstáculos. Conozca más sobre cómo trabajan los OT con niños que necesitan ayuda con las habilidades motoras.

La terapia ocupacional

La OT también puede ser de gran ayuda para los niños que tienen dificultades con el procesamiento sensorial. Cuando a los niños se les dificulta procesar la información sensorial, pueden reaccionar de manera exagerada o no reaccionar ante cosas que escuchan. Ven, prueban, tocan o huelen.

En este caso, los terapeutas podrían diseñar una dieta sensorial. Este plan incluye una serie de actividades físicas y adaptaciones diseñadas para ofrecer a cada niño la información sensorial que necesita para ayudar a los niños que buscan o evitan cierto tipo de estímulo sensorial.

La terapia ocupacional también puede ayudar a los niños con dislexia, dificultades del procesamiento visual, dificultades del funcionamiento ejecutivo y disgrafía.