Lagunas mentales

¿Cuántas veces te has ahogado en una laguna mental? ¿Qué? ¿No sabes a qué me refiero? No te preocupes, mejor presta atención. Es posible que ya te haya pasado y te hayas quedado sin aliento pues no hay nada más aterrador que olvidar algo que ibas a decir de golpe, o estar en el supermercado y no recordar ni uno de los alimentos que ibas a comprar.

Los especialistas en el tema como el neurólogo mexicano Francisco Javier Jiménez Gil, profesional que labora en el Instituto del Seguro Social, es común ver casos de amnesia transitoria en personas mayores de 50 años. Los cuales llegan hasta un 30% de incidencia.

Pero no creas que por ser menor de ésta edad te encuentras a salvo, la falta de oxigenación cerebral, la migraña, estrés continuo o haber vivido situaciones traumáticas también son factores que influyen en la aparición de las lagunas mentales.

Mientras no se convierta en un evento constante, no tenemos de qué preocuparte y menos si realizas los ejercicios que te detallo a continuación. Así contarás con las herramientas necesarias para evitar esos fallos de memoria que nos pueden contar hasta un ascenso laboral.

Saca las lagunas de tu mente

No esperes que las lagunas mentales se hagan cada vez más frecuentes. El cerebro es un músculo y puedes entrenarlo así que ponte manos a la obra y haz que esas neuronas trabajen.

Mnemotécnica:

Si te cuesta aprenderte algún número o una información, lo mejor que puedes hacer es dividirla en partes más pequeñas. A mí me ha servido con mis datos de identidad o el número de teléfono. Te pongo un ejemplo, es más sencillo aprenderse 18-18-33-10 que 18.183.310. En la primera opción te aprenderás los números por pares. En la segunda hablamos de millones y si olvidas un dígito tienes más probabilidad de olvidar el resto. Otro ejercicio que puede hacer es con los nombres personales. Si te presentan a un hombre llamado Andrés, recuerda y piensa en todos los Andrés que conoces.

Cerebro karateka

Cuando vayas a realizar trámites que tomen tiempo lleva contigo un libro. O las versiones digitales de juegos mentales como Sudoku, sopas de letras, crucigramas o cruzaletras, éstos te ayudarán a mantener activo tu cerebro. Si quieres ir más allá, aprende un nuevo idioma o inscríbete en clases para tocar el instrumento musical que más te llame la atención.

Alimentación eficiente

En numerosos estudios de MRC Human Nutrition Research se ha publicado que el consumo de Omega 3 favorece la función de la memoria y aumenta los niveles de concentración, así que empieza a incluir en tu dieta pescados de carnes grasas como el salmón y las semillas de lino o linaza.

Que el estrés no te sabotee

La aparición del estrés provoca un cambio en todo tu cuerpo y el cerebro no tiene manera de protegerse pues todo el cortisol que se libera en este tipo de situaciones ataca directamente los neurotransmisores. Dicho en otras palabras, si tienes estrés es casi seguro que olvidarás las cosas y te cueste pensar bien la situación que vivas en ese instante. Como si esto fuera poco, el cortisol también puede “nublar” tu juicio, precipitándote a tomar decisiones erradas.

Meditación mode on

No es casualidad que la meditación forme parte de las opciones curativas de la nueva era. Tan amplio es su auge que un estudio realizado en Estados Unidos reveló que esta disciplina mejora la zona de la corteza cerebral que se encarga de la atención, la memoria y la toma de decisiones. Puedes empezar hoy mismo y concentra toda tu atención en una imagen, en un sonido o en tu respiración.

También puedes reducir el consumo de cafeína o revisar tu rutina, puede que tus problemas de memoria sean por falta de sueño. Lo importante es que no te descuides y hagas todo lo que tienes a mano para que tu memoria incremente y sea invencible.