Muchas personas a lo largo de su vida, experimentan varios hobbies, entre ellos la locución. Si te llama la atención y te gustaría estudiarla, practica, y sigue las recomendaciones de cómo ser buen locutor que te indicamos a continuación.
Habla despacio y vocalizando
Sin duda, debes hablar sin prisa, ya que los oyentes entenderán mejor lo que dices. Además si hablas más despacio te dará tiempo a pensar lo que tienes que decir y evitará que hables atropelladamente.
Realiza ejercicios de respiración
Otro de los consejos de cómo ser buen locutor es la respiración. Toma aire por la nariz e intenta no llenar los pulmones de aire, sino que éste vaya a la zona del estómago. A la medida que hablas vas soltando el aire. De esta forma tu voz sale más natural. Al principio, cuesta un poco acostumbrarse, pero todo es practicar.
Aprende a improvisar
Hay situaciones en que las cosas pueden salirse del guión y te verás obligado a actuar por cuenta propia. Ya sea por una noticia de última hora, por algún error, o incluso por una respuesta cruzada de un entrevistado. Por lo tanto, intenta crear situaciones donde puedas hablar de temas aleatorios y por encima de todo, busca informaciones sobre temas que no conoces. De esa forma cada día serás mejor profesional.
Práctica de la lectura
Debes practicar lectura, por lo menos quince minutos de práctica diaria. Te dará fluidez en el habla y enriquecerás tu vocabulario con términos y palabras que no son de uso diario.
Aprender a proyectar la voz
Proyecta la voz sin gritar o forzarla. Por lo tanto, una vez que estés al aire es importante también que dejes un espacio entre tu boca y el micrófono para que la voz no suene saturada y no se sienta demasiado la pronunciación de determinadas letras como la S o la P
Importancia de las pausas
Las pausas deben ser respetadas y utilizadas al máximo, pues tienen valor psicológico y sugestivo, además de brindarnos la posibilidad de dosificar el aire para una lectura correcta.
¿Que debes evitar?
- No entres a la cabina ni te pares ante la cámara con el estómago muy lleno.
- No abuses de las sustancias tóxicas como el alcohol y el tabaco, que además son perjudiciales para la salud y muy dañinas en esta profesión.
- Evita el agua muy fría y los cambios bruscos de temperatura.
- No lleves una vida sedentaria.
- No desatiendas tu consulta con el foniatra.
