El lenguaje aprende a usarlo para sanar…

Hay muchas frases preocupantes en nuestro lenguaje, que usamos sin considerar su significado completo. Quizás simplemente porque han sido aceptadas en el conocimiento común. 

A medida que nuestros ideales progresan, nuestro lenguaje mantiene algunas frases de nuestro pasado que ya no nos sirven. Por ejemplo: Los chicos no lloran, sé buen chico, niño problema,hijo ilegitimo, y muchos más.

 Aunque estas frases pueden usarse sin intención dañina, son inherentemente negativas. Los niños pueden ser especialmente sensibles a esas frases, que pueden permanecer con ellos durante toda su vida. Las cuales tienden a afectar negativamente su imagen propia y herir su autoestima. Podemos crear un cambio positivo eligiendo no usar estas palabras y frases a medida que las vemos en nuestro vocabulario.

Es difícil examinar nuestros hábitos en términos de las palabras que usamos para expresarnos. Pero también es emocionante saber que modificando nuestro lenguaje modificamos nuestra vida y la de los otros. El lenguaje es un área donde podemos ejercer nuestro libre albedrío, creando un cambio positivo en el mundo que nos rodea simplemente eligiendo cuidadosamente las palabras que usamos.

El lenguaje

El poder de las palabras

Puede parecer una cosa pequeña, pero nuestras palabras tienen un efecto ondulante, como una piedra arrojada en un estanque. No necesitamos activamente intentar influenciar a la gente. Sucede sin que ni siquiera pensemos en ello.

Todo lo que tenemos que hacer es elegir ser más conscientes nosotros mismos. Poniendo a descansar palabras y frases que son anticuadas, insensibles o dañinas. También podemos ejercer nuestra creatividad creando nuevas frases que porten energía positiva y amorosa para reemplazar a las viejas.

Es posible que ya tengas algunas ideas, acerca de las frases que te gustaría cambiar. ​​Ahora que estás pensando en ello, puedes encontrar muchas más. 

A medida que conscientemente decides no usar estas frases, puede sentirte más ligera y alegre. Sabiendo que has elegido dejar caer el equipaje que te fue transmitido desde un momento menos consciente. Poco a poco, irás elevando el lenguaje para las generaciones futuras.