La limpieza de ambientes es algo que puede volverse esencial en nuestras vidas. Las casas, las oficinas, hasta nuestros autos, se cargan de la energía de quien lo habita o lo habitó, quien lo visita o visitó.
El problema se genera cuando esa carga que dejamos es negativa, lo cual vuelve el ambiente en cuestión en un lugar tóxico, en el que no nos gusta estar. En el que la pasamos mal, nos deprimimos de repente, nos entristecemos, nos enfurecemos. Las cosas se rompen, las plantas se mueren, el cuerpo se cansa. El ambiente, entonces, está “sucio”.
Ubicación de la carga negativa
Si bien hay varias formas en las que se puede realizar una limpieza energética de los ambientes, esta suciedad de la que hablamos suele alojarse en los rincones. Es decir, ahí donde las paredes forman los ángulos rectos de los cuartos.
También le gusta quedarse varada en las vigas. De haberlas, en las columnas, si la casa tiene. Y por supuesto, en los objetos y en los lugares más usados y concurridos (por ejemplo, en tu cuarto, sobre todo tu cama; en tu sillón favorito; etc.).
La carga negativa en nuestro cuerpo y nuestra vida
El mayor problema de estar en contacto directo con un lugar cargado de negatividad, va a ser el efecto que el mismo puede llegar a producir en nuestros cuerpos y vidas. Los dolores de cabeza frecuentes y sin soluciones aparentes. El cansancio extremo sin razón, el estrés, el mal humor. El mal desempeño repentino en áreas de la vida (trabajo, estudio, hobbies) son sólo algunos ejemplos de los más típicos.
Y esto se vuelve, por supuesto, en una gigante bola de nieve que no termina de caer ni de agrandarse jamás. El ambiente negativo me vuelve negativa a mí, por ende, yo acarreo y pego más negatividad en los ambientes. Es un círculo vicioso que se agranda y en algún momento, con alguna persona, contigo misma puede ser, explota.
La idea es no llegar jamás a ese punto. Pero para eso debes poder identificar el problema y buscarle una solución. Mi tarea en este pequeño texto es recomendarte que busques a alguien que limpie el ambiente a través del Reiki.
¿Cómo limpiar un ambiente a través del Reiki?
Lamento decepcionarte, pero esta información no es algo que pueda compartirte enteramente, ya que quienes hemos sido iniciados en este proceso de sanación hacemos una promesa tácita con nuestro maestro y con el universo de que no divulgaremos información de más con quienes no estén iniciados en esta práctica. El sentido de la misma es, en realidad, que quien no cuenta con los conocimientos inculcados por un maestro no intente utilizar los símbolos y mantras que nos son pasados.
De todas maneras, voy a darte una explicación sobre cómo es el proceso y por qué deberías contactarte con un reikista profesional para que revise y limpie tu casa.
Una persona que conoce las técnicas del Reiki podrá decirte con precisión cuáles son los ambientes o lugares cargados de negatividad a través de la utilización del péndulo: irá pasando, con el mismo, por cada cuarto interrogándole por la energía del lugar. Él recibirá la respuesta. Esto también puedes hacerlo tú si practicas un poco con el péndulo previamente para saber utilizarlo lo mejor posible.
El reikista se paseará por tu casa (o el lugar que sea) realizando símbolos con sus manos que sólo él sabrá mientras dice (generalmente de forma mental) el mantra correspondiente a cada uno. Esto lo realizará en todos los rincones de los ambientes a limpiar. Muchas veces podrá acompañarse de la incineración de carbón con mezcla para limpieza (mirra, sándalo e incienso), lo cual potenciará su trabajo.
Mantener tu ambiente limpio
Luego de que un reikista profesional haya limpiado los ambientes, te recomiendo que trates de mantenerlo ordenado e higiénico. Trata de usar un hornillo con aceites esenciales naturales cada cierto tiempo (los aromas que te nombré previamente, sándalo, mirra e incienso, son de gran utilidad).
También es importante que te bañes cuando vuelves a tu casa si vienes de un lugar donde hubo enfrentamientos, discusiones, malos tratos, etc.
Puedes tomar sesiones semanales de Reiki. Una por semana o cada dos semanas te mantendrá a ti y a tu energía equilibrados, posibilitando, así, que los ambientes que frecuentas también lo hagan.
Recuerda que mantenerte a ti y a tu hogar con una energía equilibrada y sin negatividad puede beneficiar tu vida entera. Te podrás sentir física y mentalmente mejor, despues de la limpieza de ambientes. Podrás descansar, dormir tranquila, triunfar en lo que te propongas, porque tu espíritu estará libre de la carga emocional tóxica que te produce la energía negativa que se estanca alrededor tuyo.
