El maní o cacahuete, es uno de los frutos secos más comunes, contienen una gran cantidad de proteínas, de hecho es uno de los alimentos que más proteína posee. El maní se puede comer en su forma natural, basta con tostarlos un poco y listo; también se pueden encontrar procesados y condimentados con sal, chile y hasta con sabor a limón. De cualquier forma que se coman es realmente delicioso.

El maní realmente es una legumbre, pero debido a que posee todas las propiedades de los frutos secos como los anacardos, las almendras, etc., se le incluye en la familia de los frutos secos.

El Maní

Esta semilla comestible de la planta arachis hypogaea, que hoy se cultiva en regiones tropicales y subtropicales en prcaticamente todo el mundo, se conoce y consume desde hace más de 7.000 años, y según las investigaciones arqueológicas fueron los incas quienes la extendieron por el continente americano hasta que los colonizadores la hicieron llegar a Europa y África

¿Cómo se come el maní?

Se puede comer de diferentes formas. Es bastante usual comerlos asados, al horno, crudos, con limón y sal, sobre un pan tostado como mantequilla o en la harina.

También es muy común encontrarlos fritos, aunque este proceso deteriora sus propiedades y los hace indigestos aunque puede ser la forma preferida de comerlos de muchas personas.

Además, se pueden encontrar procesados y condimentados con sal, chile y hasta con sabor a limón. De cualquier forma, que se coma el maní tostado es delicioso.

¿Cuánto maní puedo comer?

Un buen puñado de cacahuetes nos ayuda a frenar el apetito y son ideales para consumirlos entre horas. El consumo moderado nos aporta muchos beneficios. Es ideal comerlos curdos sin freírlos y sin aporte extra de sal. De esta forma, nos aporta los máximos beneficios nutricionales para nuestra salud.

Además, los cacahuetes son ricos en grasa por lo que la moderación es clave para comer este fruto seco de forma saludable. Con un puñado de este fruto seco al día (15 unidades aproximadamente), nos aprovechamos todos los beneficios que nos aporta de forma equilibrada.

Beneficios del maní

Prevención del cáncer

Al ser fuente de una sustancia como el resveratrol, ácido fólico, ácido fítico y vitamina E, el maní es un aliado importante para la prevención de algunos tipos de cáncer.

Estudios muestran que una eficiente función de prevención del cáncer de colon es el caso de personas que consumen maní regularmente, por lo menos dos veces por semana. Disminuyendo la incidencia en más de 55% en el caso de las mujeres y 25% en el caso de los hombres.

Pérdida de peso

Como es un alimento que contiene los tres macronutrientes (grasas, proteínas y carbohidratos), además de ser una excelente fuente de fibras, proporciona sensación de saciedad, especialmente para personas con dietas restrictivas, aliviando la sensación de privación (que lleva a muchas personas a comer más).

El maní es una excelente opción para ser consumido en pequeñas porciones por día.

Construcción muscular

Conteniendo una razonable cantidad de proteínas, es un alimento vegetal que tiene ricas cadenas de aminoácidos en su formación, ayudando a la construcción muscular.

Además de ello, es una rica fuente de energías, siendo ideal para la realización de actividades deportivas, como correr.

Protección del sistema nervioso

Fuente de vitamina B3, una porción de maní al día puede suplir cerca del 15% de la ingesta diaria para la protección contra enfermedades como el alzheimer o relacionadas con la senilidad, presentadas más comunmente en edades avanzadas.

De esta forma, puede ser una importante fuente de vitaminas para el ciudado del cerebro y del sistema nervioso.

Función antioxidante

Los alimentos con función antioxidante son importantes para la prevención del envejecimiento precoz, enfermedades cardiacas y hasta el cáncer.

Sabiendo eso, los maníes, ricos en vitamina E, cuentan con funciones antioxidantes que, por combatir los radicales libres, son ideales para la prevención de la degeneración.

Una curiosidad es que, en este caso, si se tuesta de la forma correcta puede aumentar la concentración de polifenoles en hasta un 22%.

Reduce el riesgo de enfermedades de Alzheimer

El resveratrol presente en los cacahuetes previene las enfermedades del corazón, cáncer, enfermedades nerviosas y las infecciones virales o fúngicas de manera eficiente.

Previene un accidente cerebrovascular

 Una vez más, el resveratrol en el maní evita golpes del corazón mediante el aumento de la producción de óxido nítrico.

Protege la piel

La vitamina E en los cacahuetes ayuda en el mantenimiento de la integridad de las células de la membrana mucosa y la piel, por lo tanto los protege de los radicales libres que causan un gran daño.

Es un multivitamínico natural

El maní contienen complejo B, vitaminas como la niacina, riboflavina, tiamina, vitamina B6, vitamina B9, ácido pantoténico y otros más.

Es una buena fuente de minerales

Potasio, manganeso, cobre, calcio, magnesio, hierro, selenio y zinc son algunos de los minerales presentes en los cacahuetes. Y todos ellos juegan un papel importante en muchas funciones del cuerpo diferentes.

Reduce el riesgo de cálculo biliar

 Sólo una onza de maní o dos cucharadas de mantequilla de maní a la semana puede salvar de cálculos biliares o de la vesícula biliar con un 25% de riesgo reducido.

Crema de maní

El Maní

Ingredientes

  • Una taza de maní tostado, sin piel y sin sal;
  • 1 cucharada de azúcar cristal (puede ser miel);
  • 1 cucharada de aceite de coco;

Preparación

A fuego bajo, deja que los maníes suelten su aceite aproximadamente 5 minutos, sólo para calentarlos sin tostarlos. Ponlos en el procesador de comida o la licuadora y licúa hasta obtener una pasta. Pon el azúcar y el aceite de coco, licúa un poco más y estará lista.

Para almacenarla, lo ideal es un frasco de cristal fuera de la heladera.

Mazapán

Ingredientes

  • 500 gr de maní tostado, sin piel ni sal;
  • 2 tazas de azúcar;
  • ½ taza de harina de maíz;
  • Un puñado de sal;

Preparación

Pon todos los ingredientes en una licuadora o procesador y licúa hasta que el resultado sea totalmente homogéneo. Cuando termines quedará una masa que debemos poner en un molde. Déjalo reposar unos minutos y estará listo para comer.