Bullying

Ey, lo que pensás que es lo peor que te puede pasar en la vida, va a hacer que no quieras hablar, que no te quieras defender ni mirar hacia arriba, que no digas cómo está tu corazón.

¿Pero sabes qué? Ahora sos bajito, pero yo y todos también lo fuimos, y no me había dado cuenta de contártelo también. Sé que lo nombré, pero no me di cuenta todo lo que no dije y quiero que sepas que no es un problema sólo de chicos como vos estás creyendo en este preciso instante.

Todos somos iguales y distintos a la vez, no te creas lo que dicen.

A tu edad vas a enfrentar todo tipo de cosas, pero no es personal, de verdad. No es contra vos sino contra ellos mismos, contra ese o esa que te grita o te hace sentir indefenso, porque ansía algo de lo que tienes y él no.

Esos niños o esas personas que te señalan, y que te hacen bullying tienen falta de cariño o atención. Nada ni nadie te va a juzgar de grande si de chico sabes que estás preparado. Hoy en día te hacen ver que sos extraño, pero no es cierto, hay miles parecidos a vos, sólo que en un aula (todavía no entiendo por qué), siempre hay uno de cada personalidad y con gustos parecidos entre sí, pero en vez de tener la oportunidad de conocer que no sos el único con tu historia, que afuera si hay un mundo más parecido al tuyo, o diferente, pero que te hace sentir bien, te hacen conocer a la minoría, demostrándose que esa es la sociedad o lo correcto, pero no.

Valorate

Contame lo que te angustia, qué queres decir antes de que me de cuenta que algo está mal, o que no queres ir al colegio o a esa salida.

Ya vas a ver que cuando crezcas vas a entender que si burlas, de grande quizás no seas feliz o haya más bronca en tu corazón, y si te burlan y no hablas. Vas a sembrar una semilla que va a crecer y crecer muy apenada, y cuando ya mires de arriba hacia abajo vas a darte cuenta que hay algo triste escondido en tu mirada y en tu corazón.

Tenes grandes valores y fortalezas que ni vos descubriste todavía, ¡si supieras a cuantas personas les haces bien! Te quiero enseñar a soltar, hablar sin callar, no te puedo hacer evitar que te cruces con gente dañina. Pero puedo hacer que no te creas todo lo que te dicen, y si sentís que es verdad, que sos así, tenes que estar orgulloso de eso, porque que seas despistado, más tímido o tímida, más distinta a lo que predomina en el grupo que ves, no es un defecto, es un rasgo de tu esencia y personalidad, que más adelante te puede servir para ser vos mismo.

No dejes de reír, no les des el gusto.

Todo este mundo va y viene. Finalmente te enseñan que de chico te tienes que parecer a todos, y de grande, si no marcas diferencia no llegas lejos. No te enseñan que no se marca diferencia con los rasgos o físicamente, sino con ideas, actitud, esfuerzo.

Tranquilo, ahora ya sabes. Sé que te asusta todo esto, pero confía. Ahora conoces el por qué y tenes que seguir adelante. Contá conmigo y tómalo como un desafío por donde todos pasan. ¿Cómo te sentís ahora?, descansá, pensalo, y mientras salgamos a dar una vuelta a la plaza y a ver todo desde una mirada diferente porque te mereces disfrutar.

Hablen con sus hijos, hablen con todos los niños.

¿Bullying?, ¿están seguros? Mejor diría el amor ausente, no bullying, la sociedad muda de afecto y el desgarro emocional del criticador, eso es. No una sola palabra que cambia con la moda.

No es la acción previa, es el efecto que causa, del que nunca se habla.

Lo diferente se agrede, la diferencia se ve terrible en vez de sumarla a mis cualidades.

Se habla a los directores del colegio, se cambia a un hijo de escuela. Pero aunque pregunten cómo te sentís, no se pregunta qué es lo que callas. ¿Qué hubieras hecho por defenderte?, ¿te sentís débil o te es indiferente?

Y el, ella, niños, cargan con la palabra víctima que es igual o peor que cargar un carro de ladrillos y sintiendo que la niñez es un castigo.

Un niño guardado es demasiado triste. Hablamos por los nenes y no por nosotros, ni con ellos. Hablamos de un fenómeno, hay debates, indignación, pero los chicos no emiten palabras y no damos espacio.

El fuerte va a sufrir porque no entiende el daño que puede hacer, y no hay débiles, sino diferentes, que así tiene que ser. Pero enséñenles a esas personitas, que piensan que es lo más trágico del mundo a lo que se van a enfrentar, a estar preparados y a ser felices. Veamos en nosotros mismos que hubiésemos querido decir, cómo nos afectó hasta hoy.

El bullying no se sufre, se vive.

Y si hubiéramos entendido que usar anteojos años después iba a ser una moda y que la mayoría no tiene la vista impecable, tener kilos demás iba a desatar en que existan hoy en día desfiles con modelos reales, que actualmente la televisión tiene la norma por ley de aclarar que las imágenes están retocadas digitalmente, o que conseguimos que ya funcione la ley de matrimonio igualitario… podemos entender que la sociedad cambia y lo va a seguir haciendo, pero hasta que siga pasando, los daños son irreversibles.

Estamos a tiempo de estimular a todos aquellos que no comprenden aún, para que sepan que si piensan que tienen algo mal, por el contrario, tienen que aprender que hoy en día lo perfecto, es lo que más antinatural es.

Hay tantos psicólogos, hay tanto resentimiento de personas que no superan el bullying, hay tanta niñez en falta… háganles saber que son importantes, tan importantes que cuando lo exteriorizan ya no van a ser los mismos. Háganlos felices, y si lo hacen, enséñenles a sus hijos a ayudar a otros amigos que no tienen padres como ustedes y la están pasando mal, porque en definitiva, hablar sana y ayudar cura.