Elegua: ¿Quien es?

Elegua o Eleggua es una de las deidades de la religión yoruba. En la santería sincretiza con el Santo Niño de Atocha, San Martín de Porres o con san Antonio de Padua. Pertenece al Panteòn Yoruba.

Por otro lado, es la protección primera, ya que es el quien abre los caminos para continuar en la religión. Los no iniciados o aleyos deben recibirlo o consagrarlo como primero. Es la vista que sigue un camino, se convierte en un guerrero temible y feroz cuando se une a Oggún y Oshosi, nada lo detiene. 

Elegua es uno de los primeros Oshas u Orishas que se recibe. Es un Osha del grupo de Orisha Oddé, a los que se le llama Los Guerreros. El es el primero de los guerreros junto a Oggún, Oshosi y Osun. En la naturaleza está simbolizado por las rocas. Vino al plano terrenal acompañando al Osha Obbatalá. Es considerado el mensajero fundamental de Olofin.

Vive en la mayoría de los casos detrás de la puerta, cuidando el ilé de quien lo posee. Dueño absoluto de los caminos y el destino, es quien cierra o abre el astral para la felicidad o infelicidad de los seres humanos. Siempre se debe contar con él para realizar cualquier cosa. Es el portero de la sabana y el monte.

Ofrenda y baile

      A Elegua se le ofrece pescado y jutía ahumada, maíz tostado, coco, manteca de corojo, aguardiente, tabaco, dulces y caramelos de todo tipo. Sus elekes son de cuentas rojas y negras alternadas. Se le inmolan chivos mamones, gallos, pollos, jutías -en las ocasiones que lo ameriten-, y otros animales que conllevan ceremoniales más complejos.

El Patakki de Elegua

Furibundo con sus descendientes al saber que Ogún había querido tener relaciones sexuales con su propia madre, Obatalá ordenó ejecutar a todos los varones. Cuando nació Changó, Elegua (su hermano) se lo llevó escondido a su hermana mayor, Dadá, para que lo criara. Al poco tiempo nació Orula, el otro hermano, Elegua, también temeroso de la ira de Obatalá, lo enterró al pie de la ceiba y le llevaba comida todos los días.

 El tiempo transcurrió y un buen día Obatalá cayó enfermo. Elegua buscó rápido a Changó para que lo curara. Luego de que el gran médico Changó curó a su padre, Elegua aprovechó la ocasión para implorar de Obatalá el perdón de Orula. Obatalá accedió y concedió el perdón. Changó lleno de gozo cortó la ceiba y de ella labró un hermoso tablero y junto con él le dio a su hermano Orunmila el don de la adivinación. Desde entonces Orunmila dice: “Maferefun (bendición) Elegua, maferefun Changó, Elegbara”.

Aspectos Relevantes

Este guerrero es un ser que forma parte de «los primeros», es uno de los seres que más poder autoritario posee sobre otros egguns u orichas. Casi todos los orichas por obligación deben de respetar a Eleggua, ya que su poder sobre el control de los caminos y en cierta manera de los destinos abarca hasta los poderes de ellos mismos.

Su símbolo (el círculo y las flechas), está presente en su totalidad en todas las casas de ifá y su jerarquía alcanza niveles superiores a Changó, ya que él es perteneciente a la hermandad de ochosi, oddúa y oggún.

Caminos de Elegua

  • Abaile.
  • Afrá.
  • Elegua Agbanukué [Agbanuké].
  • Akéru.
  • Agongo Ogo.
  • Akesan.
  • Alá Le Ilú.
  • Alá Lu Banshé.
  • Alaroye Akokelebiyú.
  • Añanki.
  • Awó Bara.
  • Elufé.
  • Barakikeñerí.
  • Elegua Bara Ala Asuayo [Lasuayo].
  • Aggó Meyó.
  • Biawooná.
  • Eborikeke.
  • Elegua Agüere Kikeño [Kinkeñe].
  • Agatigaga.

Herramientas

Eleguá se asienta en una otá (piedra), otá conchífera, de arrecife, otá con carga, caracol cobo con carga, un coco seco o de masa con carga.

Se coloca en una vasija plana, sus atributos son los cascabeles, un garabato (bastón) de guayaba, una trampa de ratón, monedas, juguetes de niño como las bolitas, pitos, matracas, sombrero de guano o paja, una maraca pintada con sus colores. Sus elekes (collares) son de cuentas rojas y negras alternadas.

¿Dónde vive?

En la naturaleza Elegguá está representado por los senderos, los caminos, las encrucijadas, a los mayores en la religión se les suele escuchar que Elegguá está en todas partes, por eso todo lo sabe, todo lo ve, prácticamente esa habilidad fue lo que lo llevó a ganarse las bendiciones de Olodumare, Olofin y Obatalá.

Cuando recibimos Eleguá, éste debe vivir detrás de la puerta principal de la casa, en el piso. En consecuencia, preferiblemente sobre un plato de barro y debe estar en compañía del resto de guerreros, Ogun, Ochosi, Ozun. A Elegguá le gusta estar detrás de la puerta de la casa porque desde ahí lo observa todo, lo vigila todo y protege la casa.

¿Cómo se atiende?

De preferencia se le atiende los días lunes, por ser inicio de semana, el principio, y de esta manera empezar con buen pie la semana. Se le puede atender con dos velas blancas encendidas, se le coloca maíz tostado con corojo, jutía ahumada y pescado ahumado (esto por lo general lo consigues en tiendas esotéricas o especialistas en vender artículos de santería) también se le coloca ron blanco y se le sopla humo de tabaco, puro o habano.

Elegua

¿Cuándo debes recibirlo?

Cuando ya tengas la firme convicción de que quieres pertenecer a esta religión, quieres empezar a dejarte guiar por lo preceptos de Osha e Ifá. Despues de eso, debes buscar una casa santoral donde puedas iniciarte, es decir, padrinos o madrinas con quien ir recibiendo los Orishas y dar cada pàso en la religión.

Recibir a este guerrero no es un juego, es un compromiso de por vida, es una deidad que va a requerir de tu eventual atención, no es algo que hoy tienes y mañana olvidas por ahí.

Rezo de Elegua

Elegguá Alaroye Alawana, tente unu kokoribiya maniku maniku ndolo apawa areretuse okolofofo okoloñiñe tani kanoko alakomandola lamú batá, addó eshureo, eshureo owó, eshureo omá arikú bagbagua.

 Altar o Trono

 Se realiza con vegetación preferiblemente usando olivo o siempre verde, además se decora con jicaritas pintadas de mitad rojo y mitad negro y deben contener jutía, pescado ahumado, maíz tostado, tabaco y caramelos. Por otro lado, sin duda se pueden agregar telas rojas, blancas y negras y no tener que usar así tanta vegetación.