El queso parmesano es considerado el rey de los quesos dadas sus características físicas y nutricionales, A continuación conoceremos todo lo referente a este tipo de queso.
Tipos
El Parmigiano Reggiano es un famoso queso italiano de consistencia dura y granular. El parmesano, sin duda, se usa rallado o gratinado. Por lo tanto, su producción se encuentra regulada por una DOP (Denominación de Origen Protegida, o Denominazione d’Origine Protetta en italiano). El queso parmesano posee grandes cantidades del quinto sabor básico.
Características
Cada tipo de queso se diferencia, o se distingue de los demás debido a las características, adquiere según sus componentes y el modo de su elaboración. Sin embargo, los ingredientes como materia prima en la elaboración del queso parmesano, sin duda, son los que van a proporcionarle las diferentes propiedades tanto físicas como nutricionales. El parmesano al tratarse de un tipo de queso curado posee la particularidad de ser un tipo de queso de elevada concentración nutricional debido a su bajo contenido de agua.
Valor nutricional
El queso parmesano ha sido distribuido históricamente a nivel mundial dada sus cualidades gastronómicas, sin embargo se conocía poco propiedades nutricionales que esté poseía. Ciertamente el mismo constituye un elemento desde el punto de vista nutricional en oligoelementos indispensables para el mantenimiento óptimo de las funciones corporales.
Sin embargo, desde el punto de vista energético se trata de un alimento que aporta gran cantidad de calorías por lo cual se considera un alimento Útil para las personas que llevan a cabo grandes actividades físicas o que requieren calórico para compensar diversas funciones corporales o por el contrario se recomienda el uso de este tipo de queso para la alimentación de niños y jóvenes en pleno desarrollo ya que la energía que aporta ayuda al mantenimiento y realización de sus actividades física.
Te regalaremos una increíble receta de parte de nuestro chef, para que puedas apreciar este increíble queso.
Ingredientes:
1 kg. de patatas
80 gr. de mantequilla
Leche
Tartufo negro
Sal
Una maceta de espárragos
Una yema por persona
Parmiggiano-Reggiamo
Procedimiento
Realizar un clásico puré de patatas, hirviendo las patatas con piel en abundante agua salada (durante unos 20 y 40 minutos según el tamaño de las patatas), pelarlas y pasarlas por el pasapuré (si no tienes usa un tenedor).
Añádele la mantequilla, la leche caliente el tartufo en laminas y la sal. Por otro lado limpia los espárragos y fríelos con un poco de aceite.
Cuanto el puré haya alcanzado una consistencia cremosa quítalo del fuego, pon en cada uno de los platos 2 cucharadas de puré. Cuece durante pocos segundos la yema en agua caliente con unas gotas de vinagre y colócala en el centro del plato encima del puré de patatas. Añade los espárragos y el parmesano cortado en petalos.
