¿Qué es un médium?

Un médium es un individuo de cualquier edad, género, educación o cultura del que se asegura le es posible establecer contacto con porciones de su inconsciente, y que le permiten desde allí acceder a realidades no ordinarias y eventualmente comunicarlas. No está muy claro que sea una actividad extrasensorial, sino probablemente mediada por el «sensorio» hacia zonas poco conocidas de la actividad psíquica.

¿Cómo saber si eres uno o puedes llegar a serlo?

En primer lugar, la mayoría de los médium han experimentado terrores nocturnos durante la infancia, tener que dormir con la luz encendida, incluso de mayor. Normalmente los niños ven más que los adultos, pero algunos que lo ven todo suelen tener problemas para dormir sin luz y con la oscuridad, pues su penumbra se llena de sombras y como todavía no entienden, ni tienen a nadie que los oriente pues el miedo los domina.

Sentir que alguien nos toca sin que nadie lo haga, o la sensación de que se nos sentaron en la cama, o que se hundió nuestro colchón.

Sentir fríos extraños y repetitivos que se prolongan a veces días desapareciendo de golpe y erizamientos.

Escuchar voces, e incluso dialogar con ellas. Descartando por supuesto una enajenación mental. Por desgracia muchas personas que son médiums han terminado siendo tratadas como esquizofrénicos, en lugares Psiquiátricos.

Sueños premonitorios, sueños con guías (ángeles) o familiares muertos, fallecidos.

Visiones estando despierto. Intuición muy desarrollada. Conocer con antelación los pensamientos y/o comportamientos de los demás.

Sentir las emociones de otras personas incluso estando separadas. «Enorme sensibilidad al dolor ajeno» …

Capacidad de sanar con las manos y con la intención de curar.

 Transmitir mensajes de guías, espíritus maestros y/o espíritus de personas fallecidas (que escuchamos en nuestras mentes o a través de nuestros oídos).

Hacer viajes astrales espontáneos, ver tu cuerpo separado de ti, ir a lugares sin saber, aun estando acostado.

Y por supuesto la parte clásica de que un espíritu entre dentro de ti e incluso llegue a dominar tu cuerpo.

¿Después de saberlo que debemos hacer?

Esta respuesta depende de lo queremos hacer en primer lugar hay personas que a pesar de que la certeza de que se conectan con el mundo espiritual no quieren saber nada de ello.

Otras al contrario desean con muchas ansias poder desarrollar este don, para diferentes fines: ayudar a otras personas y también porque no para lucrarse económicamente ejerciendo profesionalmente.

Si este es tu caso sigue estos consejos que te detallamos a continuación:

Practicar el ensueño

Una técnica interesante es la de intentar permanecer en vigilia antes de dormir. Esto produce un ensueño que nos permitirá viajar astralmente y sentir el otro mundo y sus energías. Es posible que los sueños se mezclen con la realidad tangible, con el tiempo el aprendiz de médium puede comenzar a discriminar una cosa de la otra.

Hacer ejercicio

Se recomienda a todo médium que haga ejercicio físico, al hacer ejercicio se potencia la función fisiológica del cuerpo y así mismo se acelera el metabolismo para alimentarnos e ingerir líquidos, cada vez que tu bebes agua purificas tu cuerpo, todo el producto del metabolismo que corre por tu sangre va a resultar como contaminante para ti.

Sentir la energía de los demás

Un ejercicio que se hace en muchas escuelas es el de intentar sentir la energía de las personas que nos rodean. Esto se hace con los ojos cerrados e intentando proyectar nuestro cuerpo astral más haya de nosotros, tratando de sentir con nuestro cuerpo astral a los demás. Una técnica simple para comenzar a sentir el otro mundo.

Meditación activa

Una práctica muy interesante es la de la meditación activa. Esta es una meditación que se hace con los ojos abiertos en un lugar que haya mucha gente. Sí, quizá es lo opuesto de la meditación tradicional.

Médium

Consiste en sentarse cómodo en un parque e intentar centrarse en el tercer ojo, entrecerrar los ojos e intentar ver con los ojos sin focalizar el entorno. Esta meditación es muy útil y todo aquel que quiera saber cómo transformarse en médium debería practicarla.

Equilibra tu energía

Equilibra tu energía con cuarzos, yoga y Tai chi, y conviértete en sanadora energética. Practica Yoga y Tai chi para que puedas equilibrar tu energía. Haz ejercicios de respiración para que organices la vibración de tu energía y acude con un experto en cuarzos para equilibrar tus chakras o meridianos.

Ejercicio de Meditación: El despertar

Durante 7 días seguidos, en una habitación silenciosa donde podamos sentarnos cómodamente repetiremos: “Mi voluntad es fuerte. Mi cuerpo fluídico despierta. Yo lo quiero”.

La secuencia de repetición será de tres veces cada una de las frases en intervalos de cinco minutos.

Tras ello, debemos fijar la vista en un  objeto que haya en la sala, durante más o menos 15 minutos. Pasado ese tiempo se cerrarán los ojos, y se respirará profunda y reposadamente durante 7 veces seguidas, podemos pronunciar mentalmente un mantra, “Om”, por ejemplo.

Sintiendo que esa nota llega hasta el cerebro.  La repetición continuada de este ejercicio aumenta la capacidad de concentración y conexión.

Para finalizar realizar la siguiente oración:

Oración para los medium

Dios Todopoderoso, permitid a los buenos espíritus que me asistan en la comunicación que solicito, preservadme de la presunción de creerme al abrigo de los malos espíritus; del orgullo que pudiera ofuscarme sobre el valor que obtenga; de todo sentimiento contrario a la caridad con respecto a los otros médiums, si soy inducido en error, inspirad a alguno el pensamiento de que me advierta, y a mí la humanidad que me hará aceptar la crítica con reconocimiento, tomar para mí mismo, y no para otros, los consejos que se sirvan darme los buenos espíritus.

Si por cualquier concepto intentase abusar o envanecerme de la facultad que habéis tenido a bien concederme, os ruego que me la retiréis, antes de permitir que la desvíe de su objetivo providencial, que es el bien de todos y mi propio adelantamiento moral.

Padre Nuestro y Ave María.