La tripofobia es la repulsión o el miedo irracional a un conjunto de agujeros, hoyos o huecos. Ese miedo se expande cuando los agujeros son de tamaño similar y están bastante juntos, es una ansiedad hacia los patrones repetitivos. Aunque parezca increíble, se contempla que esta fobia la sufren un 25% de los seres humanos y es más grave y común de lo que creemos.

Esta enfermedad no ha sido estudiada a plenitud por la ciencia, de hecho no es una fobia aún reconocida. El Manual Estadístico y Diagnóstico de Desórdenes Mentales, no la ha aprobado como una fobia a nivel de las más reconocidas, porque no se han realizado los estudios suficientes como para nombrarla como tal. La palabra se acuñó en el año 2005. El origen etimológico de la palabra tiene raíces griegas, en la que “trypa”significa agujero y fobia, que significa miedo.

Origen

Existen diferentes teorías de por qué inicia la tripofobia, pero una de las más acertadas y reconocibles, es un estudio publicado por el Psychological Science.  En donde asevera que los patrones repetitivos e iguales que provocan tanta ansiedad y miedo a las personas que sufren de tripofobia, son los mismo que nos hacen reaccionar ante el miedo que nos da el ver las especies más letales del planeta.

Los animales más venenosos tienen en la piel figuras geométricas que se repiten constantemente, ejemplo de ello son: cobra real, ciertas arañas, pulpo anillos azules, diferentes serpientes, la rana punta de flecha y el caracol cono de mármol.

El miedo a la figuras geométricas de estos animales viene  desde tiempos inmemoriales, en donde el ser humano desarrolló un mecanismo de defensa ante el peligro que causaban estas especies.

Es por ello que ahora en día el ver estas formas y agujeros es el mecanismos defensivo que tenemos muy en el interior, que nos dejaron nuestros antepasados.

Tipos de tripofobia

Como mencionábamos anteriormente, existe más de una única clase de esta fobia o temor, encontrando una clasificación muy básica que comprende la tripofobia en la piel y la tripofobia extrema.

El primero de estos tipos de tripofobia (tripofobia en la piel) se asemeja enormemente a la dermatopatofobia, y hace referencia al temor irracional que se manifiesta frente a las erupciones y afecciones que tienden a presentarse a lo largo de la piel, como si se tratara de patrones secuenciales y repetitivos

La tripofobia

Es posible visualizar una gran cantidad de imágenes que hacen referencia al estímulo que desencadena este tipo de tripofobia  las cuales, si bien son reales en determinados casos, poco se han visto en seres humanos.

Por otra parte, el segundo de los tipos de tripofobia (tripofobia extrema) es aquel en el cual la tolerancia al estímulo de este trastorno es bastante reducida, ya sea que se trate de patrones repetitivos relacionados con afecciones de la piel, panales de abeja, gusaneras, etc.  Este tipo de tripofobia disminuye notablemente la calidad de vida de quien lo padece, ya que puede encontrar múltiples factores de estímulo fóbico con gran asiduidad

Síntomas

Cuando las personas con tripofobia son expuestas a patrones geométricos repetitivos como semilla de loto, panales de abejas, fresas o crustáceos, pueden manifestar síntomas, como:

Náuseas.

Temblores.

Sudoración.

Asco.

Llanto.

Escalofríos.

Malestar.

Aumento del ritmo cardíaco.

Comezón y hormigueo generalizados.

En casos más graves, la persona puede sufrir también ataques de pánico, debido a un nivel extremo de ansiedad.

Evolución de la tripofobia

Como dijimos antes, esta fobia viene de nuestros antepasados que nos dejaron el rechazo instintivo hacia las figuras que se repiten, para reconocer a las especies venenosos. Ahora bien, este tipo de fobia se ha hecho más reconocible en la actualidad, debido al lanzamiento virtual que ha tenido. Con la llegada de las redes sociales, los cibernáutas se percataron de que al compartir imágenes de agujeros profundos y repetitivos, causaban repulsión no sólo a ellos, sino que también a la mayoría de personas que veían dichas imágenes.

Tengo tripofobia, ¿qué debo hacer?

Normalmente, las reacciones provocadas por el estímulo de la tripofobia suelen cesar una vez que se retira la vista del mismo. Sin embargo, existen casos en los que los síntomas suelen agravarse y prolongarse, causando un malestar mucho mayor en aquel que padece el trastorno.

Si es tu caso, deberás acudir a un experto de la salud mental, quien se encargará de evaluar tu condición para así poder brindarte una solución efectiva a tu problema.

Esto podrá implicar tratamiento farmacológico o tratamiento psicológico, el cual básicamente incluye terapias de exposición, las cuales buscarán enfrentarte a los estímulos de la fobia, con el objetivo de que puedas, de manera progresiva, ir superando la ansiedad, el asco o el temor a los mismos.

Tratamiento

Existen varias formas de tratar la tripofobia, siendo la desensibilización sistemática la terapia más eficaz. Este tipo de terapia ayuda a controlar el miedo, a través del cambio de respuesta ante el estímulo causante de la respuesta desproporcionada, por lo que se debe acudir con un especialista en el tema. Ya que se debe tener precaución de no producir un nuevo trauma o acrecentar el miedo que ya se presentaba. 

Esta terapia debe es realizada por un psicólogo por medio de la exposición gradual al estímulo que produce la fobia. A través del diálogo, el terapeuta utiliza técnicas de relajamiento para que la persona enfrente el miedo, hasta lograr disminuir el malestar que provoca.

Esta terapia puede acompañarse con otras técnicas que ayuden a reducir la ansiedad y tratar este miedo:

La tripofobia
  • Ingesta de medicamentos que ayuden a reducir la ansiedad y los síntomas de pánico, como betabloqueantes y sedantes;
  • Práctica de técnicas de relajación como yoga, por ejemplo;
  • Práctica de ejercicio para reducir la ansiedad. Conozca algunos consejos para reducir la ansiedad.