El anís estrellado es un elemento clave de cualquier herbolario, al que se atribuyen diversos beneficios para la salud, y que se suele usar como apoyo organoléptico, pero también por sus virtudes y propiedades aperitivas, digestivas, antiespasmódicas, antibacterianas, antivirales, antisépticas, antifúngicas y expectorantes. 

Beneficios

Mejora del sistema digestivo

Con las propiedades antes vistas, el anís es buen remedio natural contra los cólicos y otros problemas relacionados con el aparato digestivo. Suelen prepararse infusiones de anís precisamente para reducir los gases, molestias, dolores en el sistema intestinal, combatir la acidez y ayudar a realizar la digestión con mayor rapidez.

Bueno para el sistema nervioso

El anís no solamente es perfecto para el sistema digestivo sino también para alejarnos del estrés y calma los nervios. Esto lo podemos conseguir gracias a las infusiones de anís que suelen dejarnos como nuevos y relajarnos totalmente para dormir tranquilamente.

Mejora nuestro sistema respiratorio

Esta planta todavía nos ofrece muchos más beneficios. Sus propiedades expectorantes y antiinflamatorias permiten limpiar los pulmones y eliminar posibles fluidos que se acumulan en esta parte del cuerpo. De manera que suele mejorar los procesos de tos, bronquitis, asma o gripe.

Para que dé resultado, se preparan infusiones con las semillas secas del anís. De todas maneras, ante cualquier afección relacionada con la salud siempre iremos al médico para que nos vea y determine el tratamiento a aplicar.

Otros usos

Como hemos apuntado, entre sus diversas propiedades, está ayuda a bajar la menstruación, especialmente en aquellas mujeres que sufren de amenorrea o dismenorrea. También es una planta relacionada con el deseo sexual, pues se dice que incrementa la líbido. Es bueno para mitigar las úlceras en la boca.

Alitas de pollo fritas con anís

Ingredientes

1/2 kilo alitas de pollo

3 Cucharadas Miel

5-7 anís estrellado

1 cucharada salsa de soja

1 cucharada vinagre

al gusto Sal y pimienta

1 cucharada Brandy (opcional)

Pasos

Lavar muy bien las alitas y secarlas con papel absorbente

Triturar bien el ajo con la sal, pimienta y adobar las alitas

En un caldero colocar las 3 cucharadas de aceite, cuando esté bien caliente freír las alita, que sellen y queden bien doradas

Cuándo las alitas estén bien doradas, agregar una taza de agua y el anís, la soja, el vinagre y la miel y remover, dejarlas cocer por 10 minutos, deben quedar bien doradas.

Dejar secar el líquido, y agregarle la cucharada de Brandy, remover y apagar; el uso del anís estrellado le da un gusto especial a nuestras alitas.

Natillas con merengue de lima y crumble de avellana

Ingredientes

1/4 l de leche

75 g de azúcar

4 yemas

1 vaina de vainilla

Un anís estrellado

1 semilla de cardamomo

Para el merengue de lima:

1 clara

1/2 lima

50 g de azúcar

Para el crumble de avellana:

75 g de avellanas

50 g de mantequilla

40 g de azúcar

75 g de harina

Pasos

Para las natillas, pon las yemas en un bol grande y bátelas con un poco de leche.

Pon el resto de la leche en una cazuela. Agrega la vaina de vainilla, la semilla de cardamomo y el anís estrellado. Agrega el azúcar y caliéntala a fuego suave.

Vierte la leche caliente sobre el bol de las yemas y mezcla bien. Pasa todo nuevamente a la cazuela y cocina las natillas a fuego suave, sin dejar de remover hasta que coja cuerpo (esto se nota cuando al mover la cazuela las natillas se mueven en bloque y cuando la espuma de los bordes desaparece). Hay que tener mucho cuidado de que no hierva ya que la leche se cortaría y se estropearían las natillas. Deja que se enfríen y cuélalas.

Para el crumble de avellana, mezcla en un bol, el azúcar con la mantequilla. Aplasta las avellanas y añadelas. Mezcla bien e incorpora la harina. Sigue mezclando hasta conseguir una masa parecida a las migas. Extiéndelas sobre la placa del horno forrada con papel de hornear y hornéala a 180ºC durante 10-15 minutos (aprox.).

Para hacer el merengue de lima, pon 1 clara en un bol limpio y seco. Agrega la ralladura de 1/2 lima y bate con la batidora de varillas eléctrica. Cuando empiece a blanquear, añade el azúcar poco a poco y sigue batiendo hasta que la clara quede bien montada.

En el último momento, sirve las natillas con el crujiente de avellana y el merengue de lima.

Caldereta de mariscos

Ingredientes

4 cigalas

2 langostinos

4 gambas

8 almejas

2 ajos frescos

2 zanahorias

1/2 bulbo de hinojo

4 hojas de acelga

8 maíces fritos

1 cucharada de fécula de patata

agua

aceite de oliva

sal

pimienta

1 anís estrellado

perejil

Pasos

Pela las gambas, los langostinos y las cigalas. Reserva las cáscaras.

Para el caldo de acelgas, pon en una cazuela abundante agua con sal y una pizca de pimienta. Introduce unas ramas de perejil y las hojas de acelga troceadas (sin la penca). Cocina durante 15-20 minutos. Tritura y reserva.

Para el caldo de anís, pon abundante agua en otra cazuela con una pizca de sal. Introduce el anís estrellado, el bulbo de hinojo troceado y las cáscaras del marisco que tenías reservadas. Cocina durante 15-20 minutos. Cuela y reserva. Diluye la fécula de patata en agua fría y añádela al caldo. Ponlo de nuevo al fuego hasta que espese un poco. Reserva.

Pela y corta las zanahorias en bastones y cocínalos en una cazuela con un buen chorro de aceite. Añade las judías verdes, unas troceadas y otras finamente picadas. Agrega los ajos frescos troceados. Salpimienta y añade las almejas.

Introduce las gambas, los langostinos y las cigalas en la cazuela de las verduras. Rehoga bien y añade un poco de caldo de anís y el caldo de acelgas. Cocina durante 1 minuto.

Pica finamente los maíces. Sirve la caldereta en un plato hondo. Espolvorea con perejil picado y decora con una rama de perejil.