Conoce quien fue Margaret Schilling, la mujer sordomuda la cual su manera de morir, afligió a la comunidad de Athens en Ohio. Síguenos leyendo.

Margaret Schilling:

Athens en Ohio es en esta tranquila ciudad universitaria donde se encuentra un antiguo hospital psiquiátrico del que se ha hablado mucho por los sucesos paranormales que le rodean: The Ridges. Este asilo es muy conocido por aquí. Estuvo abierto en los años 1870.

Se trataban allí clase de patologías. Había enfermos mentales, por supuesto, pero también gente afectada de tuberculosis o, incluso, personas con depresiones nerviosas.

Muy rápidamente el asilo empezó a ganarse una reputación siniestra. Y con razón: En los años 30 se practicaban allí lobotomías y sus métodos eran bastante horrorosos. Utilizaban jeringas gigantes que hundían a través del globo ocular, hacia la parte del cerebro que según los doctores podía controlar el comportamiento.

Estas prácticas extremas y entorno austero del asilo fascinan y asustan a los habitantes de Athens. Este edificio es a la vez inmenso e impresionante. Y estas características son en parte responsables de que mucha gente lo encuentre horroroso. Ciertos estudiantes incluso creen que está encantado.

 Margaret Shilling, una interna del manicomio que, según cuenta la historia local, desapareció durante un mes y apareció muerta, como por arte de magia, dejando una misteriosa marca que nadie logró borrar.

El fantasma más famoso de Ohio

Margaret Shilling es conocida hoy como el fantasma más célebre de Ohio. Aunque la mancha de su cadáver permanece a resguardo de los curiosos, no hay semana en que algún grupo de jóvenes no trate de colarse en el edificio para observarla de primera mano.

 Y, por supuesto, circulan todo tipo de rumores sobre su carácter sobrenatural, como que aquellas personas que la tocan sufren una maldición y acaban suicidándose. Pero ¿quién era en verdad Shilling? Y ¿qué sucedió el mes de diciembre de 1978 en que desapareció?

No se conoce mucho más sobre este caso ya que sólo la familia puede acceder a su historial médico y nada han revelado sobre el asunto. Sabemos, eso sí, que Shilling era una interna de larga estancia en el hospital, en el que debía llevar años por sufrir “demencia”; además, era sordomuda, condición que, incluso a finales del siglo XX, podía ser razón suficiente para acabar encerrado en un hospital mental.

En aquella época, muchos de los pacientes del frenopático tenían permiso para vagar libremente por el hospital y sus jardines durante el día. Ocasionalmente, algún paciente se perdía en el bosque o se quedaba a dormir en el jardín, pero siempre aparecían. Pero una noche de diciembre, en uno de los inviernos más duros registrados nunca en Ohio, Shilling desapareció, y nadie fue capaz de encontrarla.

El personal del manicomio la buscó repetidamente por todo el recinto, pero no apareció. Algunos creían que se había suicidado, preocupándose de que nadie la encontrara. Estuvo desaparecida más de seis semanas.

Enero de 1979

 Pero en enero de 1979, un miembro del personal de mantenimiento encontró su cadáver: estaba en medio del suelo en una habitación del ático, donde supuestamente ya habían buscado a la desaparecida. Su cuerpo estaba desnudo y sus ropas estaban apiladas sobre el alféizar de una ventana.

Tras levantar el cadáver, los allí presentes vieron que se había formado una mancha. Los operarios del sanatorio trataron de borrarla, rascando el suelo de cemento. Pero fueron incapaces de acabar con ella. 40 años después la mancha sigue siendo perfectamente visible.

Hipótesis Científica

Científicos afirman que cuando una persona muere y el cuerpo se derrumba sobre el suelo, especialmente en un lugar soleado. El cuerpo se descompone y los fluidos pueden escaparse e incrustarse en la tierra. Por tanto, es posible que algunos compuestos químicos del interior del cuerpo se filtraran en el suelo.

Esa sería la explicación científica, pero para otros la explicación es más paranormal.

Explicación paranormal

Esta mancha indeleble a través de los años es la prueba irrefutable que el alma de Margaret no encontró el descanso y que continúa vagando por los lugares aledaños.

De hecho, tres años después de la muerte de Margaret, una estudiante de la Universidad estatal de Ohio, (cercana al manicomio). Creyó percibir la silueta y se aventuró en la habitación maldita. Su curiosidad le costó caro.

Una noche la estudiante se despertó y se encontró cara a cara con la silueta de esta mujer.

Margaret Schilling

Esta visión la aterrorizó grandemente. Según cuenta la leyenda, esta chica no fue capaz de hablar en días. El terror no la dejaba hacerlo. Un semana más tarde de la aparición, la encontraron muerta en su habitación, se había suicidado. La habitación 428,  la cual años después se convertiría en un lugar inhabitable.

Margaret Schilling: El último artículo sobre el caso

 En él se explica que la investigación ha progresado muy poco, pero se explica que Shilling estaba viva cuando subió al ático. Lo que no explican es cómo las puertas se cerraron automáticamente por fuera. 

 Dado que se trataba de un centro estatal, debía ser la policía de Ohio la encargada de investigar el asunto, pero en conversación con el Dpto. de Policía, no hay ningún archivo sobre el caso en sus ficheros.

En el momento de su muerte Shilling tenía 53 años, estaba casada y, según un historiador local, tenía un hijo. El certificado de su muerte asegura que falleció por “causas naturales”. Pero lo más probable es que muriera de frío, encerrada en una habitación de la que no lograba salir, sin poder gritar en busca de ayuda, dada su condición de sordomuda y, probablemente, drogada con algún fármaco psicótico como la clorpromazina, cuyo uso estaba muy extendido en aquella época.

Margaret Schilling: Últimas investigaciones

En 2008 un grupo de investigadores de la Universidad de Ohio analizó la mancha dejada por el cadáver de Shilling y publicaron los resultados de su análisis en la revista ‘Journal of Forensic Science’. Su conclusión no deja lugar a dudas: la mancha original debió formarse debido a la descomposición del cadáver, pero lo que vemos hoy en día son las marcas de los productos químicos que se usaron para tratar de limpiarla, muchos más agresivos que los que se usan en la actualidad.

Lo que no dice el estudio es que gracias a la mancha conocemos hoy el caso de Shilling y podemos preguntarnos por la suerte que corrieron muchos pacientes como ella en los manicomios. Y basta darse una vuelta por el lugar en el que vivió y murió esta mujer para hacerse una idea.