La leyenda de la luna:

A medida que ha pasado el tiempo la luna ha sido protagonista de múltiples mitos y leyendas. El dia de hoy te traemos la leyenda de la luna. Síguenos leyendo.

La luna tiene un romance con el Sol

Cuentan las leyendas populares que la luna mantiene una estrecha relación con el sol, hasta aquí todo cierto, pero los decires no hablan de una vinculación astronómica de vital importancia para la existencia de la humanidad, sino de un noviazgo más propio de una telenovela de sobremesa.

Los astrólogos, profesionales reconocidos por su habilidad a la hora de soltar incongruencias científicas, afirman que la luna nueva se recoge sobre ella misma para comenzar un nuevo ciclo, conoce al Sol y comienza a expandirse, tras esto el sol la fecunda y queda embarazada en lo que sería la luna llena. De esta forma, da a luz y se vuelve a vaciar poco a poco. Como este ciclo sucede en un periodo medio de 29,5 días, se relaciona directamente con la menstruación. Realmente no hay ningún indicio que demuestre que esto es real, como es lógico.

El dios Quetzalcóatl y el conejo

Un día, hace cientos de años, el dios Quetzalcóatl decidió viajar por todo el mundo. Su aspecto era el de una serpiente adornada con plumas de color verde y dorado, así que para no ser reconocido, adoptó forma humana y echó a andar.

Subió altas montañas y atravesó espesos bosques sin descanso.  Al final de la jornada, se sintió agotado. Había caminado tanto que decidió que era la hora de pararse a descansar para recobrar las fuerzas.  Satisfecho por todo lo que había visto, se sentó sobre una roca en un claro del bosque, dispuesto a disfrutar de la tranquilidad que le proporcionaba la naturaleza.

Era una preciosa noche de verano. Las estrellas titilaban y cubrían el cielo como si fuera un enorme manto de diamantes y, junto a ellas, una anaranjada luna parecía que lo vigilaba todo desde lo alto. El dios pensó que era la imagen más bella que había visto en su vida.

Al cabo de un rato se dio cuenta de que, junto a él, había un conejo que le miraba sin dejar de masticar algo que llevaba entre los dientes.

– ¿Qué comes, lindo conejito?

– Sólo un poco de hierba fresca. Si quieres puedo compartirla contigo.

– Te lo agradezco mucho, pero los humanos no comemos hierba.

– Pero entonces ¿qué comerás? Se te ve cansado y seguro que tienes apetito.

– Tienes razón… Imagino que si no encuentro nada que llevarme a la boca, moriré de hambre.

El conejo se sintió fatal ¡No podía consentir que eso sucediera! Se quedó pensativo y en un acto de generosidad, se ofreció al dios.

– Tan sólo soy un pequeño conejo, pero si quieres puedo servirte de alimento. Cómeme a mí y así podrás sobrevivir.

El dios se conmovió por la bondad y la ternura de aquel animalito. Estaba ofreciendo su propia  vida para salvarle a él.

– Me emocionan tus palabras – le dijo acariciándole la cabeza con suavidad – A partir de hoy, siempre serás recordado. Te lo mereces por ser tan bueno.

Tomándole en brazos le levantó tan alto que su figura quedó estampada en la superficie de la luna. Después, con mucho cuidado, le bajó hasta el suelo y el conejo pudo contemplar con asombro su propia imagen brillante.

– Pasarán los siglos y cambiarán los hombres, pero allí estará siempre tu recuerdo.

Su promesa se cumplió. Todavía hoy, si la noche está despejada y miras la luna llena con atención, descubrirás la silueta del bondadoso conejo que hace muchos, muchos años, quiso ayudar al dios Quetzalcóatl.

Los lobos y la luna

Cuenta la leyenda, que una noche ancestral, la Luna bajó a la tierra y se quedó enredada entre las ramas de un árbol. En ese momento apareció un lobo y la empezó a acariciar con su hocico y jugaron toda la noche, hasta que ella volvió al cielo y el lobo al bosque, y esta, le robó la sombra al cánido para recordarle para siempre y él desde entonces, le aúlla en las noches de luna llena para pedirle que se la devuelva.

La leyenda de la luna

Partimos de la base de que el aullido del lobo, al igual que el de muchos cánidos, es una forma de comunicación más, utilizada para alertarse unos a otros, en la época del celo, para marcar territorios, arropar a sus cría. Las noches de luna llena no tienen nada que ver con un incremento en los aullidos, aunque, como es verdad, en las noches despejadas de luna llena, la actividad siempre es mayor posibilitada por el aumento sustancial de la luminosidad de la noche.

El origen de los sueños

Según las creencias árabes, el Dios de los Sueños y el Dios de la Tormenta se vieron enfrentados, por lo que el primero tuvo que huir junto a sus hijos de la furia del segundo.

El Dios del Sueño y sus hijos se escondieron en una isla desierta, lo que entristeció a muchos de los sueños. Por fortuna, en las noches en las que aparecía la Diosa Luna, la tormenta desaparecía y los sueños podían moverse libre y felizmente.

Eran en aquellas noches que los sueños buscaban a personas que dormían para hacerles volar su imaginación.  En el caso de los sueños traumatizados, estos creaban pesadillas en aquellas mentes que invadían.

Crecimiento del pelo

Según la creencia popular, si quieres que tu pelo crezca más rápido, debes cortártelo cuando la Luna está en su fase cuarto creciente; el cabello dañado es mejor cortarlo durante la Luna llena, ya que esto ayudaría a su reparación; y para depilarte, la mejor fase lunar es la de cuarto menguante, que retrasa el crecimiento. No obstante, no existe ningún estudio científico que asegure la influencia de la Luna en el cuidado del cabello.

La luna llena afecta las emociones

Este mito nunca ha sido ni probado, ni desmentido. Se conoce que en muchas ciudades cuando hay luna llena, la criminalidad aumenta. Sin embargo, no hay ninguna evidencia científica que sustente este argumento. Según los que insisten en esta leyenda, esto ocurre porque el ser humano es 70 por ciento agua y la luna afecta las mareas.

Imágenes que forma la luna

Se dice que entre las montañas formadas por su orografía podemos ver una liebre, un hombre con leña al hombro o al mismísimo San Jorge con su lanza…  Aunque a día de hoy la ciencia haya conseguido eliminar muchos de estos mitos, siempre seguirá manteniendo su halo de “misterio” para los espectadores de su vecino planeta.

Esperamos que haya sido de tu agrado este articulo sobre La leyenda de la luna.¡Hasta la proxima!.