Sin dar muchos rodeos, antes de que leas esta nota, deberías saber que lo escrito aquí le pasó a la amiga de un amigo de otra amiga y que por supuesto, hay tantos hombres y mujeres en este mundo como armas de seducción. Pero trataremos de condensar todo (hombres, mujeres y armas de seducción) en un mismo lugar.

No hay recetas válidas para seducir a una persona, cada quien es único e irrepetible (¡por suerte!) y puede que los siguientes tips te vengan como anillo al dedo o no. Como diría un célebre mago: “puede fallar”.

La idea es que disfrutes y tu pareja también.

Armas de seducción

Confiar en tu intuición

La mente de la mujer es poderosa. Ese sexto sentido que la vida nos dio está ahí para algo. Hazle caso. El mundo está lleno de gente extraña y gente maravillosa. Antes de hacer cualquier cosa, asegúrate de entregarte por completo a la persona que consideres valga la pena. Moraleja: tu pareja estará encantada de compartir momentos agradables con una mujer que sea genuina y se cuide a sí misma. Alguien que no se valora a sí mismo no puede hacer feliz a nadie más.

Manos a la obra

Desde el momento cero en que nos encontramos con la otra persona empiezan a suceder cosas. Ya sea si se conocen desde hace cinco minutos, un año o toda la vida…nunca des nada por sentado. ¡Actúa!. La iniciativa es muy importante. Otra arma de seducción es ponerte linda y haz que las cosas sucedan. Muchas veces nos quedamos esperando a que la otra persona tome las riendas. No debería ser así. Las mujeres hemos evolucionado. Por eso; agarra el teléfono, llama, mándale un mensaje, una foto…algo que le haga saber al otro que también piensas en él/ella. No seas como la princesa encerrada en la torre, esperando a su príncipe salvador. Baja de la maldita torre, deshazte del dragón y ve por lo que has soñado.

Armas de seducción para enamorar

Acción y Reacción

Bien, ahora viene el arma de seducción divertida. Guarda las inhibiciones en el cajón y déjate llevar. La celulitis, las estrías y la pancita son cosas que miran las mujeres en otras mujeres, los hombres no. Si, son visuales casi en un %100, pero no miran nuestras “imperfecciones”. Créeme, su visión estará concentrada en “otras cosas”. Así que olvídate de cómo te ves y demuéstrale lo que sabes. Tu pareja querrá más. Dalo por hecho. Advertencia; si menciona que deberías ejercitarte o hacer algo con tu dieta, dile de igual manera que debería hacer algo con su idiotez. Una cosa es que cuide tu salud, otra que sea un/una insensible en la cama, ¡eso jamás!.

Artillería pesada

como dijimos antes, el incentivo visual es muy importante. Así tardes 2 hs en producirte y 3 min es desnudarte (como un buen plato de comida) no dudes en acudir a todas aquellas armas que, en sentido figurado, le vuelen la cabeza. Para las más osadas la secretaria, la sirvienta, la conejita… siempre están disponibles. Pero recuerda también, que debajo de todo eso, hay una persona que merece ser apreciada tal cuales es. Deja que la diosa Afrodita duerma un poco y lee el punto 5.

Esto no es Hollywood

dejemos de lado, por un rato los videos musicales y las películas condicionadas. La realidad es otra; eso de morderse los labios, cruzarse de piernas de forma insinuante, las miradas lascivas, sacudir el cabello como el príncipe de Shrek, maquillarse como mapache, depilarse hasta las cejas, los tacos de 40 cm.. realmente no es necesario. Despeinada, sonrojada, natural, con tu remera vieja y tus medias a rayas, bailando por la casa, es todo lo que necesitas. Esto no significa, en absoluto, que estés “descuidada” todo el día, pero te dará puntos extras, cuando te aparezcas en ese vestido que tanto le gusta.

El cuerpo no es solo un envase

esto significa que lo de adentro es muy importante y eso incluye a tu cerebro. No es necesario que te anotes en un curso de neurociencias o física cuántica; lee, escribe, haz lo que te gusta, trabaja, mantente activa. Ten tus propios espacios. Al final del día podrán contarse todo lo que han hecho y sabrán cuanto se han extrañado. Verte feliz, independiente y llena de ideas es más estimulante que cualquier afrodisíaco.

No todo es sexo

ni la vida trascurre en la cama. Basta de pensar que todos los caminos conducen a Sodoma y Gomorra. Saca a tu pareja a pasear, salgan a comer (y paga la cuenta), hablen de sexo pero no lo practiquen, conozcan a otras personas, miren películas, duerman vestidos. Visiten a seres queridos, pasen tiempo por separado. Peleen y reconcilíense.

Quien espera, desespera. Y si te espera, vale la pena. ¡ A volverse locos!.